Experimentar los trabajos de torsión en las clases de Yoga es sumamente productivo.
La columna como centro de nuestro esqueleto y miembro vital de la circulación de energía, es tan importante, que mantenerla fuerte y dúctil, es lo mejor que podemos hacer por nosotros mismos.
Además si vamos más allá de lo físico, que cargamos en nuestras espaldas? Qué nos pesa? Qué no podemos manifestar de nuestros sentimientos? Todos estos interrogantes que podemos meditar en cada asana.
Una muy simple, ubicados boca arriba en el piso, con los brazos extendidos en cruz y las palmas hacia arriba, apoyar los pies en el suelo, doblando las rodillas, voltear las piernas hacia la derecha, mirar hacia la izquierda , elevar el brazo derecho y llevarlo a la rodilla izquierda tratando de que esta se acerque al piso, mantener la postura mínimo tres inspiraciones y luego repetir hacia el otro lado.
A practicar, reflexionar y disfrutar!!! por eso retorcer,retorcer,retorcer!!!!
